Los actores charros cumplen condena en la Celda 211

En el año 2008, la productora gallega Vaca Films comienza con su gran proyecto: Celda 211. La búsqueda de la localización protagonista es ardua. Finalmente, la cárcel de Zamora, ya sin uso, supone un escenario perfecto en el que poder trabajar. Pero falta un pequeño detalle: la historia requiere de un gran número de figurantes. Debido a los diversos contactos que se habían establecido entre los responsables de Vaca Films y Salamanca Film Commission, se realiza un primer casting en la búsqueda de pequeños papeles y actores secundarios. La Universidad Pontificia sirve de escenario perfecto y los responsables de la empresa quedan tan contentos que deciden hacer más castings en Salamanca. El resultado final es espectacular: hasta cuatro autobuses diarios llenos de “actores salmantinos” partían de Salamanca a Zamora en busca de la fama.

Celda 211 fue un éxito de taquilla y de crítica. De hecho, cosechó numerosos Goyas, y suponemos que en todos esos premios cada uno de nuestros “actores” puso su granito de arena.

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